Amor,
Ayer te volví a ver, estaba dispuesta a dejarte marchar, lo prometo, te puse mil excusas, te dije que ya no sentía lo mismo, que todo había acabado, que no quería enfadarme para que me dijeses que me querías, que estaba harta de ti, incluso te lancé en brazos de otra, y yo tan dispuesta a abalanzarme sobre los brazos de otro, el que fuera. Entonces ocurrió, no sabía que fueses así tan dulce, pensaba que solo te querías a ti mismo, pero vi que no.
Cuando te vi, ni un beso ni un abrazo nada, incluso dentro del coche intenté no besarte, pero acercaste tus labios a los míos, y no pude resistir, pensé bien ya no siento lo mismo, aunque me mentía.
Al final de la cita, conseguiste que cambiase de opinión, conseguiste que me volviera a interesar por ti como nunca.
Lo tenías todo perdido, o eso creía y conseguiste lo que nadie puedo lograr, eso es difícil, por eso te admiro aún más.
Me despido hasta la próxima carta, que será pronto, ya lo verás, o quizás no.
Porque....¿Recibirás esta carta?
No creo, o quizás si.
Te conocí un día sin querer
ResponderEliminarY nunca me pude imaginar
Que después de un tiempo
No te podría olvidar
Te veo y me estremezco.
Pero no me quisiera ilusionar
Porque cada vez te veo más lejos
Y sin poderte alcanzar
Y no lo puedo cambiar.
gracias por tus palabras, son preciosas.Escribes muy bien.
ResponderEliminar